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El 18% de la carga global de enfermedades en el mundo está relacionada con problemas vinculados con la salud sexual y reproductiva. El ejercicio de estos derechos es un elemento clave para el desarrollo de los países y para la equidad de género. La muestra está organizada por medicusmundi gipuzkoa y financiada por la Diputación Foral.

Del 14 al 27 de noviembre (de lunes a domingo de 17:00h. a 20:00h. y los sábados y domingos también de 12:00 a 14:00.), el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Bergara acogerá, con la colaboración de su Servicio de Igualdad, la exposición de medicusmundi gipuzkoa “Derechos sexuales y reproductivos, los más humanos de los derechos”. Se trata de una muestra que la ONGD guipuzcoana está itinerando por diferentes municipios de la provincia.

La muestra, realizada con apoyo del Movimiento Manuela Ramos de Perú y financiada por la Diputación Foral de Gipuzkoa, trata de sensibilizar a la población guipuzcoana acerca de la situación de los Derechos Sexuales y Reproductivos en el mundo. La mujer es la protagonista de la exposición, partiendo de que la garantía y el ejercicio de dichos derechos por parte de ella suponen un elemento clave para el desarrollo de los países y para la equidad de género.

A través de once paneles, la exhibición trata de explicar qué son los derechos sexuales y reproductivos y de acercarse a algunos de ellos, como el derecho a una vida sin violencia; a la integridad física y mental; a una sexualidad plena y sin riesgos; o a una maternidad voluntaria, libre y saludable. También plantea cuáles son las barreras para el ejercicio de estos derechos y sugiere iniciativas en las que la población guipuzcoana puede implicarse con el fin de colaborar para que los derechos sexuales y reproductivos sean una realidad para todas las personas.

La falta de acceso a la salud sexual y reproductiva constituye un importante problema de salud pública, especialmente en los países empobrecidos. Alrededor de 530.000 mujeres fallecen en el mundo por causas relacionadas con la maternidad (el 13% por abortos realizados en malas condiciones) y, según el Fondo de Población de las Naciones Unidas, el 18% de la carga global de enfermedades en el mundo está relacionada con problemas vinculados con la salud sexual y reproductiva, como el VIH/sida (cuyo 52% de personas afectadas son mujeres), o las ETS (Enfermedades de Transmisión Sexual). Asimismo, se calcula que más de 200 millones de mujeres desearían espaciar o limitar su descendencia, pero no tienen acceso a servicios y métodos de planificación familiar, y que unas 2.400.000 mujeres y niñas son víctimas de explotación sexual.

El hecho de que en muchas regiones del mundo las mujeres no tengan control sobre su propio cuerpo, sus relaciones sexuales, su casamiento, el número de hijos e hijas, etc., determina que los periodos de gestación y crianza ocupen la mayor parte de sus vidas, reduciendo la posibilidad de iniciar o completar su educación, acceder a un empleo, o participar en otros espacios públicos, lo cual supone un elemento clave para el desarrollo de los países y para la equidad de género. Precisamente la inequidad de género se presenta como una de las dos barreras principales para el ejercicio real de los Derechos Sexuales y Reproductivos. La otra sería la falta de políticas integrales y normativas de obligado cumplimiento de los mismos.


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